Excursión a Yosemite

El Parque Nacional más conocido de los Estados Unidos está a tres horas y media de viaje desde la ciudad de San Francisco. Aprovecha tu estancia aquí para hacer una excursión a Yosemite.

El Parque Nacional es famoso por Tuolumne Grove, el bosque de las secuoyas gigantes, los árboles más altos del mundo. Aquí se encuentra la célebre secuoya “Grizzly Giant”, un gigantesco ejemplar con una circunferencia en su base de casi 30 metros. ¡Hacen falta más de 10 personas para rodearla!

El mejor momento del año para visitar este bosque de más de 1500 años de antigüedad es entre mayo y octubre. Cuando bajan las temperaturas la nieve puede impedir el acceso a los caminos que llevan aquí, pero el valle de Yosemite en invierno sigue siendo espectacular.

Las excursiones a Yosemite desde San Francisco en español tienen un problema: las visitas guiadas sólo están disponibles en inglés, pero os facilitarán una audioguía en español.

El Parque tiene varios restaurantes en los que podrás comer, pero si no queréis perder el tiempo os recomendamos comprar algo para llevar en el supermercado de Yosemite Village.

Continúa el tour y descubre el pueblo indio de Ahwahnee, la estación de los gardabosques o las cataratas más altas de América del Norte, las Yosemite Falls, de más de 700 metros. Si quieres ver el parque desde lo alto, no te puedes perder el mirador de Tunner View. Cerca de aquí se encuentra el Salto Bridalveil, una cascada de casi 200 metros de altura.

El lugar más característico del Parque Nacional es el Half Dome, un domo de granito que sobre sale casi 1500 metros del suelo. Los amantes de la escalada no se pueden perder El Capitán, una pared vertical de casi un kilómetro de altura. Otro punto importante de Yosemite es Glacier Point, un espectacular mirador.

Después de la excursión a Yosemite de un día entero, podrás regresar a tu hotel en San Francisco.