Ni Villa Olímpica ni Villa Olímpico
Un escalofriante relato que hará que La Bruja de Blair parezca un juego de niños a su lado. Algunos expertos la califican como “la tragedia arquitectónica que conmovió a Spielberg”.
Mañana es la inauguración de las XXXI Olimpiadas modernas, las llamadas por el mundo del marketing Río 2016. Sin duda uno de los eventos deportivos más esperados del año. Miles de atletas llevan cuatro años sudando, cayéndose, lavando su ropa sucia después de cada entrenamiento (con lo insufrible que es poner la lavadora después de hacer deporte) y haciendo todos los sacrificios habidos y por haber para poder tener la oportunidad de sus vidas. Encima en Río de Janeiro. Playas de arena blanca, Copacabana, una estatua de Ronaldo (el bueno) haciendo el avioncito encima del Corcovado (aunque no entiendo por qué le han puesto el pelo largo) y Caipirinhas. El sueño de cualquier deportista ser humano.
Ronaldo… no te preocupes si la estatua no se te parece mucho. Hay gente que está peor.
Con este panorama tan alentador y con los ojos empañados en lágrimas de la emoción, los primeros atletas que van a participar en Río 2016 han ido desembarcado en la ciudad brasileña durante estos días. Y nos consta que alguno de ellos se hubiese dado la vuelta y marchado hacia su hogar nada más entrar en los alojamientos de la Villa Olímpica.
Las crónicas de estos días pasados hablan de condiciones bastante inferiores a lo que cabría esperar para una cita de este calibre. Como si de una partida de Sim City se tratase, los recursos como el agua, el gas y la electricidad se mezclaban en cantidades ingentes por doquier, haciendo de un acto tan simple como ir al baño toda una aventura. Eso cuando había baño, porque algunas delegaciones como la argentina denunciaron que en algunos de sus lavabos no estaban ni conectadas las cañerías del desagüe.
Dramatización de un atleta al llegar a la Villa Olímpica. ¿Dónde está tu Río paradisiaco ahora?
Con toda esta confusión y ante las caras largas de los atletas, algunas delegaciones como la australiana, la argentina y la sueca decidieron realojar a sus atletas en apartamentos próximos a la Villa Olímpica. Desde Kolaboo, viendo que la delegación española podía tener el mismo problema, nos pusimos en contacto con el Comité Olímpico Español para ofrecer nuestra plataforma a la hora de buscar apartamentos donde alojar a nuestros deportistas. ¡No queremos perder ninguna medalla porque nuestros atletas no estén cómodos!
Hoy por hoy no hemos recibido ninguna respuesta por parte del COE, aunque bien es cierto que según el Comité Organizador de Río 2016 todos los fallos en las instalaciones de la Villa Olímpica deberían de estar resueltos a día de hoy. De todos modos esperemos que se hayan quedado con nuestra página y que si les hace falta, se animen a conocer la auténtica experiencia de vivir en Río de Janeiro estando unos días en un apartamento. Seguro que nuestros atletas iban a tener menos disgustos… y nosotros tan contentos de colaborar con la causa.