Cabo de Gata tiene unas condiciones insuperables para el buceo, sus fondos heterogéneos con zonas arenosas, praderas de posidonia, zonas de vegetación y zonas de roca que generan una gran diversidad en el paisaje y el tipo de animales que las habitan. Para descubrir el fondo marino del Mediterráneo andaluz no hay nada mejor que apuntarse a hacer un tour de buceo en Cabo de Gata, donde se proporciona todo el equipo necesario de submarinismo, un guía que hace el recorrido por el litoral y recuerdos fotográficos de las 2 horas que dura la actividad.
La visibilidad y limpieza de sus aguas es muy alta por hallarse en una zona protegida y de escasa población humana. Además gracias a los inviernos suaves, el buceo se practica en cualquier temporada del año.
Índice
Isleta del Moro
Es una pequeña población de pescadores donde su playa entre dos grandes formaciones rocosas, destaca entre las casas blancas típicas de la zona.
El buceo en este lugar es muy popular ya que se adapta a a diferentes niveles y se pueden realizar inmersiones de distintos tipos. Incluso es buena zona para realizar snorkel y observar sus fondos desde la superficie.
Si te decides por hacer submarinismo desde una embarcación, una buena opción es acercarse hasta la Piedra de los Meros, que como su propio nombre indica te permitirá ver estos peces y otros bastante grandes que no encontrarás en las zonas cercanas a la costa.
Punta del Cuervo
En la cala del Cuervo, a media hora de Las Negras, se encuentra una famosa pared de roca natural donde habita una gran variedad de fauna marina.
Foto:Zangarreon
Para llegar hasta allí, conduce por la carretera que sale desde el camping de Las Negras hacia el sur y te encontrarás con ella en menos de medio kilometro. Por lo que en temporada de gran afluencia, es más recomendable ir andando desde el camping, donde hay más aparcamiento.
Si prefieres disfrutar del lugar sin sumergirte, puedes optar por realizar una salida de kayak en Las Negras para conocer todos la animales que habitan la zona.
Cala del Carnaje
El Carnaje es una cala salvaje, presidida por el Cerro de los Lobos, formada por rocas volcánicas y pequeñas piedras. La parte buena es que es muy poco transitada, por lo que el buceo en sus aguas te permitirá contemplar las praderas de posidonia en total tranquilidad.
El puerto de salida de la mayoría de las inmersiones, al igual que en Punta del Negro, se sitúa en Las Negras. Para llegar por carretera al Carnaje, desde Rodalquilar hay que tomar un desvío que sale a la derecha, en el que vienen señalizadas tanto esta cala como el faro de la Polacra.
El sendero es de tierra, y el final del camino deberás realizarlo a pie, aunque no es muy largo y pronto te encontrarás con este recóndito y precioso lugar.
Cala del Toro
La Cala del Toro se encuentra situada entre La Isleta del Moro y Rodalquilar. Para llegar hasta allí hay que caminar por un sendero entre palmeras y pinos. El viaje en coche se hace por la carretera AL-4200 dirección Rodalquilar y pasado el desvío de la Isleta. El coche hay que dejarlo aparcado en una explanada.
Es otro lugar perfecto para realizar submarinismo, ya que sus fondos son el lugar de vida de multitud de peces, como el mero, el principal protagonista.
Si tras pasar un día allí tienes aún fuerzas, te aconsejamos subir hasta el mirador de la Amatista, que no se encuentra muy alejado. Las vistas del Cerro de Los Frailes merecen la pena.
Foto: José Juan Sánchez
Cueva del Francés
Uno de los lugares más míticos para bucear en Cabo de Gata. Aunque solo es posible llegar a ella en barco, la mayoría de las actividades de buceo que se realizan en la zona te llevan a este sitio.
También puedes optar por llegar hasta allí en Kayak, otra de las actividades más populares del Cabo. Si quieres puedes echar un vistazo a nuestro post donde te contamos todas las rutas en Kayak que existen en la zona.
Se encuentra situada entre La Isleta y San Jose, y si te sumerges en sus aguas, verás pulpos, morenas y un montón de animales más.
Esta ruta esta recomendada si ya tienes algo de experiencia en buceo, ya que es larga y hay que controlar el aire.
Bonus: La inmersión del Vapor
Por último aunque esto no se trate de una cala ni una playa, es una de las inmersiones favoritas para los buceadores experimentados.
Se trata de un barco hundido del que no se conoce muy bien su historia, pero se ha convertido en todo un icono de la zona.
Se encuentra a una profundidad de 26 metros, y como hemos comentado antes, solo se puede hacer esta inmersión con una titulación avanzada. Además de pedir un permiso especial en la Secretaría General de Pesca.
